No todas las laminas marmolizadas de PVC en el mercado tienen la misma calidad. Al seleccionar un producto, debemos fijarnos en:
- Grosor: lo recomendable es un grosor mínimo de 0.55mm para garantizar durabilidad y evitar deformaciones.
- Composición: las mejores laminas contienen una alta proporción de resina de PVC puro, idealmente sobre 80%.
- Soporte: un soporte o base de fibra de vidrio aporta mayor estabilidad dimensional.
- Acabado: debe ser uniforme, sin imperfecciones, rayas ni burbujas en la superficie.
- Colorido: los tonos deben ser uniformes y los patrones de vetas continuos.
- Flexibilidad: la lamina debe enrollarse fácilmente sin agrietarse ni marcarse.
- Certificaciones: buscar sellos de calidad como ISO 9001 o marca CE.
- Garantía: elegir laminas con garantía de 10 años o más, que cubra defectos de fabricación.
Con estos criterios podemos asegurarnos de comprar laminas de la más alta calidad para disfrutar de su belleza por muchos años